El pasado viernes el Ministerio de Exteriores de Marruecos informó en un comunicado que había recibido una carta del presidente Pedro Sánchez donde se reconocía «la importancia de la cuestión del Sahara para Marruecos». El Gobierno comunicaba de esta forma que España reconoce el plan de autonomía marroquí para el Sahara Occidental como «la base más sólida, realista y creíble para resolver el contencioso» histórico sobre la exprovincia española. Ante este giro, parte del gobierno de coalición y oposición han mostrado su descontento. Analizamos esta situación con el politólogo, Quique Montero.